El mandatario hizo su ingreso a la reunión a las 19.45 y se sentó con Sergio Massa a su izquierda y Eduardo Wado de Pedro a su derecha. Alberto llegó acompañado por el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, el canciller Santiago Cafiero y la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz. A la presencia del Presidente, que es a su vez titular del PJ nacional, se sumó la participación en la sede de Matheu 130 del ministro de Economía, Sergio Massa, y el diputado y referente de La Cámpora Máximo Kirchner, quien no estaba previsto que participara pero se sumó al encuentro en el día de su cumpleaños. El jefe de La Cámpora ingresó a las instalaciones del PJ junto al ministro del Interior, Eduardo «Wado» De Pedro.
Mesa política: quienes estuvieron en el cónclave
Por el kirchnerismo asistieron también el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés Larroque; el secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica, Abel Furlán; la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti y el diputado nacional Sergio Palazzo.
En tanto, por el Frente Renovador concurrieron la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau; el ministro de Transporte, Diego Giuliano; la titular de Aysa, Malena Galmarini; el diputado bonaerense Rubén Eslaiman y el intendente de San Fernando, Juan Andreotti.
En representación de los gobernadores eran de la partida Axel Kicillof (Buenos Aires), Jorge Capitanich (Chaco), Mariano Arcioni (Chubut), Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero).
La representación de los intendentes quedó garantizada con Martín Insaurralde, Fernando Espinoza, Mario Secco y Juan José Mussi, de la Tercera Sección electoral; y Alberto Descalzo, Mariela Fernández y Lucas Ghi por la Primera Sección electoral. Por el sindicalismo participaban los cotitulares de la CGT, Héctor Daer; Carlos Acuña y Pablo Moyano; como así también el secretario general de la CTA, Hugo Yasky.
Se trata de las distintas corrientes que componen el Frente de Todos (FdT) que conformaron esta «mesa política», convocada por el Presidente y titular del Partido Justicialista (PJ), Alberto Fernández, para comenzar a definir la estrategia electoral de la coalición oficialista y acordar reglas internas de participación en las PASO previstas para agosto.
La sede del PJ nacional del barrio porteño de Balvanera -ubicada en Matheu 130- fue el epicentro desde las 19 de la cumbre política, que ofició de puntapié inicial para comenzar a definir la estrategia, el reglamento interno y el programa con las propuestas para un próximo Gobierno. Desde la convocatoria realizada por Twitter el pasado domingo 5, el Presidente mantuvo varias reuniones con gobernadores peronistas; intendentes bonaerenses; con Massa, con «Wado» De Pedro -representante en esa conversación del sector de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner- y con el secretario adjunto de Camioneros y triunviro de la CGT Pablo Moyano; para acercar posiciones y dialogar sobre el futuro del FdT.
«La idea es trabajar coordinadamente para que el FdT sea la mejor opción electoral para este año», indicaron fuentes del Gobierno de la provincia de Buenos Aires. El ministro de Transporte bonaerense y dirigente massista Jorge D’onofrio sostuvo que «la voluntad de Sergio es que participemos activamente» y además consideró que «muy sano que el FdT tenga una mesa política donde empezar a debatir algunas cuestiones». Desde el sindicalismo cercano al Gobierno, el secretario general de SMATA, Ricardo Pignanelli, también formó parte del mitín. «Tenemos que tirar todos del mismo carro, más allá de que en la PASO haya dos o tres fórmulas», dijo Pignanelli, quien citó la máxima justicialista «El que gana, conduce y el que pierde, acompaña».
La lista final de los 33 asistentes a la mesa política del FdT finalmente quedó integrada por Alberto Fernández, Eduardo «Wado» de Pedro, Sergio Massa, Agustín Rossi, Juan Manuel Olmos, Santiago Cafiero, Victoria Tolosa Paz, Chino Navarro, Julio Vitobello, Máximo Kirchner, Andrés Larroque, Anabel Fernández Sagasti, Malena Galmarini, Cecilia Moreau, Diego Giuliano, Rubén Eslaiman, Juan Andreotti, Axel Kicillof (Buenos Aires), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Gustavo Bordet (Entre Ríos) ,Jorge Capitanich (Chaco), Mariano Arcioni (Chubut), Mario Secco, Fernando Espinoza, Mayra Mendoza, Alberto Descalzo, Mariel Fernández, Lucas Ghi, Héctor Daer, Pablo Moyano, Hugo Yasky, Sergio Palazzo y Abel Furlán.
Casi en paralelo a la mesa política del FdT, a portavoz presidencial Gabriela Cerruti aseguró que «hay una persecución judicial contra la vicepresidenta Cristina Kirchner, a la vez que remarcó que «la causa en la que fue condenada es inventada». «Lo que el Gobierno entiende es que hay una persecución judicial contra la vicepresidenta», sostuvo en la habitual conferencia de prensa de los jueves y agregó: «La causa en la que fue condenada es inventada, no tiene pies ni cabeza. Ella fue llevada con la intención firme de condenarla y, por lo tanto, de inhabilitarla que es proscribirla a participar de las próximas elecciones».
La vocera de Gobierno detalló que las proscripciones pueden ser políticas y judiciales, y aclaró que las inhabilitaciones judiciales suelen utilizarse como forma de proscripción política. «El Presidente cree absolutamente que Cristina Fernández de Kirchner no tiene nada que ver con todo aquello que se le imputa en esta causa judicial y que el intento de inhabilitarla que ahora no es firme, pero que puede serlo en cualquier momento, en una año electoral es una herramienta de la justicia para usarlo en cualquier momento y lo que busca es que no pueda participar de las situaciones electorales que se dan en la Argentina», desarrolló Cerruti.
En las últimas horas, el flamante jefe de Gabinete, Agustín Rossi se expresó en la misma sintonía al asegurar que «Cristina (Kirchner) está proscripta y eso es malo para la democracia».
«Está proscripta porque ella, inteligentemente, cuando anunció que no va a ser candidata se imaginó que si seguía diciendo que sería candidata la Justicia iba a acelerar los tiempos y convertir lo que hoy no es una sentencia firme en una definitiva. Podía llegar a suceder lo que sucedió con Lula en la primera elección», afirmó Rossi.