El Gobierno no deja de celebrar el ajuste. En línea con lo dicho entre burlas por el presidente Javier Milei en la Fundación Libertad, el vocero presidencial Manuel Adorni dijo este jueves que lo que está haciendo el mandatario «recién empieza» y que el plan «es que cada vez el peso del Estado sea menor». La motosierra «es eterna, no tiene fin”, afirmó.
Esta mañana, en su habitual conferencia de prensa, Adorni fue consultado sobre el Plan Motosierra, luego de que Milei en la cena de gala de Fundación Libertad se burlara de los economistas que lo critican. “La manga de pifiadores dijeron ‘es muy poquito de motosierra y mucho de licuadora’. Pregunten qué pasó con las transferencias discrecionales y los intermediarios. La mayor parte del ajuste es motosierra. A veces la licuadora si se vuelve permanente es motosierra”, señaló el mandatario.
En esa línea, el vocero presidencial ratificó este jueves que los planes de ajuste llegaron para quedarse. “La motosierra es eterna, no hay fin de motosierra. Es para siempre. El camino que estamos transitando recién empieza”, indicó el funcionario.
“Por supuesto que hubo tal vez un shock mucho más fuerte en términos de reducción de gastos, traducido en motosierra, por las circunstancias con las que nos encontramos el 10 de diciembre. Pero la motosierra es parte de la filosofía de este Gobierno. Es que cada vez el peso del Estado sea menor y que cada vez los bolsillos de los argentinos sufran menos por la presencia del Estado», insistió.
Luego, en un acto de optimismo sobre el futuro electoral de su espacio, aseguró: «Vamos a hablar de motosierra hoy, dentro de cuatro años, y si Dios así lo quiere y los argentinos lo consideran, será motosierra por 8 años».
«Va a ser así siempre, de motosierra van a escuchar hablar mucho ”, concluyó.
El discurso de Milei en Fundación Libertad
La intervención de Milei en la cena de gala de Fundación Libertad fue extensa, duró 55 minutos y se centró principalmente en destacar la reducción del déficit fiscal.
«Lo que era imposible, lo alcanzamos el primer mes», festejó el jefe de Estado. Eufórico, contó que «hojearon los números con Toto (Caputo)», que se puso «bullish» y que lamentó el esfuerzo que está haciendo el «pobre» ministro del Interior, Guillermo Francos, para que se apruebe la ley ómnibus en el Congreso. «Le dije ‘tiren la Ley Bases, tiren todo que vamos a lograr todo esto a pesar de la política'», remató.
En ese marco fue que cuestionó a los economistas que hablan de atraso cambiario y, sin nombrarlo, se burló de Carlos Melconian, quien también estaba como espectador a tan solo unos metros de distancia. “La manga de pifiadores dijeron ‘es muy poquito de motosierra y mucho de licuadora’. Pregunten qué pasó con las transferencias discrecionales y los intermediarios. La mayor parte del ajuste es motosierra”, agregó y planteó que “a veces la licuadora si se vuelve permanente es motosierra”.