El cuerpo de Raquel Candía, la pareja del exfutbolista Fernando «Negro» Cáceres que murió este lunes tras caer del séptimo piso del edificio al que recién se habían mudado en la localidad bonaerense de Ramos Mejía, no presenta «signos de defensa previos a la caída», según los resultados preliminares de la autopsia.
Por el momento, la Justicia analiza tres hipótesis sobre la muerte de Candía: accidente, suicidio o femicidio. Esta última línea investigativa, sin embargo, estaría casi descartada debido al resultado que arrojó la autopsia y la escena en la que sucedió el hecho.
De acuerdo con los resultados de la necropsia, la víctima sufrió «lesiones y fracturas producto de la caída», mientras que «no tiene lesiones compatibles con agresiones previa a la caída».
Esto se suma, además, a las condiciones que encontraron las autoridades policiales al llegar al domicilio donde ocurrió la muerte de Candía: el ex futbolista estaba acostado en la cama -lejos del balcón-, lo que demostraría que no estuvo involucrado en el hecho ya que no puede movilizarse sin la ayuda de otra persona.
Por ahora, Cáceres no fue indagado y se encuentra en libertad, aguardando las diligencias procesales que indique la UFI de Homicidios, a cargo de Carlos Arribas.
Mientras avanza la investigación, familiares de Candía denuncian que la mujer no se suicidó. «Mi hermana no se mató, a mi hermana la mataron. Estoy re seguro que ella no se va a matar. Lo que tengo claro es que la mataron», expresó el hermano en diálogo con los medios. «Los vecinos dijeron que hubo violencia, empujones y griterío antes de que se caiga», recordó el hombre.
«Yo soy prima de la víctima y venimos a ver exactamente qué paso porque no creemos que ella se haya tirado. Ella es la pareja, pero también sé que tiene conflictos con la hija o la expareja. Pero no creo que se haya tirado», expresó por su parte la prima de la víctima, Lourdes, quien se hizo presente en el domicilio de Ramos Mejía tras conocer la muerte de Candía.
La pareja del Cáceres murió este lunes, tras caer del séptimo piso del edificio al que recién se habían mudado ambos, situado en la calle Suipacha 360 del partido bonaerense de La Matanza. La mujer cayó al patio interno del inmueble, pero testigos señalaron que en las últimas horas se habían escuchado gritos provenientes del departamento que habitaba junto a Cáceres.
La historia de Fernando «el Negro» Cáceres
El ex jugador de Argentinos Juniors, River y Boca, entre otros equipos, se desplaza en silla de ruedas desde hace más de 15 años, luego de un ataque a tiros que sufrió en un intento de robo el 1 de noviembre de 2009.
En aquella oportunidad, el ex defensor circulaba a bordo de su automóvil y al llegar al cruce de las calles Gaona y Falucho, en Ciudadela, fue interceptado por cuatro delincuentes armados que se movilizaban en dos Fiat Siena robados, en uno de los cuales llevaban secuestrado a un remisero.
Cuando Cáceres quiso dar marcha atrás para esquivar a los ladrones, uno de ellos disparó a través del parabrisas y le dio en la cabeza.
El exfutbolista quedó en gravísimo estado y perdió el ojo derecho, pero además el proyectil le quedó alojado en el cerebro.
Ante esa situación se vio obligado a movilizarse en silla de ruedas. Por el ataque, dos de los asaltantes, apodados «Kuki» y «Chanchi» -de 17 años en ese momento- fueron declarados culpables en el juicio.