La foto de Luis Barrionuevo junto a Javier Milei deberá esperar un poco más. El candidato de La Libertad Avanza fue el único orador del acto realizado en el Salón Goldencenter de Parque Norte, en el que se esperaba la presencia del titular de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA), quien finalmente no asistió a pesar de haber sido el principal organizador del evento. Hubo, sin embargo, espacio para presentar formalmente a dos funcionarios clave de un eventual gobierno ultraliberal: Emilio Ocampo al frente del Banco Central y Guillermo Ferraro en Infraestructura. Durante una hora de exposición, Milei respondió a las críticas que recibe y ratificó su programa «a 35 o 40 años», su intención de avanzar con la dolarización y el «plan motosierra»: «Al que venga a gastar, le corto la mano».
Curiosamente, el primer canto que sonó ni bien Milei pisó el escenario fue el ya clásico libertario «La casta tiene miedo». Entre la audiencia había afiliados del gremio que conduce Barrionuevo y de Comercio, el sindicato anfitrión al que pertenece el predio, asi como empresarios del rubro gastronómico y hotelero. En primera fila, además de Ocampo y Ferraro se pudo observar a dirigentes como la candidata a goberandora bonaerense Carolina Píparo junto a su vice Francisco Oneto; el candidato a jefe de Gobierno Ramiro Marra; los candidatos a diputado Bertie Benegas Lynch, Oscar Zago y Marcela Pagano, asi como los jefes de la campaña Karina Milei y Carlos Kikuchi, entre otros. Aunque circularon versiones en la previa acerca de pagos de hasta 200 mil pesos para ocupar una silla, desde el espacio de ultraderecha aseguran que no se trató de un evento para recaudar fondos. Lo cierto es que el aforo no se completó.
Barrionuevo, en tanto, miró el acto desde Mar del Plata, debido a que el evento estaba originalmente organizado para el martes pasado, día en que Milei participó del debate por la eliminación del impuesto a las ganancias en el Congreso. Desde el entorno del sindicalista aseguraron que debía cumplir con compromisos previos en la ciudad costera. Sin embargo, al iniciar su discurso, Milei hizo un guiño hacia una de las colaboraciones que, según trascendió, le habría ofrecido: contribuir con la fiscalización. «Si de acá al 22 de octubre mejoramos nuestra fiscalización y que más gente vaya a votar, no les quepa ninguna duda que vamos a tener ‘¡Viva la libertad!’ en primera vuelta», aseguró.
A medida que se acercan las elecciones, el líder libertario da más precisiones sobre su plan de gobierno y, en este sentido, sinceró que piensa realizarlo «en un plazo de 35 o 40 años», pero, aclaró: «Parece muy largo, pero si ustedes quieren correr una maratón siempre hay que dar el primer paso». También indicó que «durante la última dictadura se abrió primero la economía pero no se bajó el gasto público», por lo que reconoció que «no traemos algo nuevo». Asimismo, mostró que la metáfora del «plan motosierra» tiene otros usos. «Estamos frente al primer caso en la historia en que vamos a tener un presidente economista, ortodoxo hasta la médula y que al que venga a gastar le corto la mano«, aseguró.
Aunque la previa del acto generó más expectativa de lo que realmente fue, sí hubo lugar para anuncios. Así, presentó a dos de los funcionarios que serían parte de su gobierno. Emilio Ocampo en el BCRA y Guillermo Ferraro en Infraestructura, uno de los ocho ministerios que imagina el economista. Ferraro fue director y presidente de empresas del sector de servicios y entidades bancarias y se desempeñó como director de la consultora KPMG hasta abril de este año. También tiene trayectoria en el sector público, de la mano de Eduardo Duhalde como subsecretario de Industria de la Nación, entre 2002 y 2003 y en la administración porteña durante la gestión de Cambiemos. «‘Que se vayan todos’ es mi cancion favorita», dijo en una parte de su alocución. Una vez más, los límites de la casta se vuelven difusos.
De tanto en tanto, Milei se despachó con alguna respuesta a quienes esta semana criticaron la dolarización. A Carlos Melconian le aseguró que «hay tuco y hay fideos» para realizarla, con una «ingeniería financiera para poner en valor» los títulos públicos y al presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti le dijo: “Lo que tendría que explicar el señor Rosatti es por qué para él robar esta bien, porque para mí y para los argentinos de bien, robar está mal”. Asimismo, pidió un aplauso para su abogado, luego de pedirle a Alberto Fernández que suspenda decisiones gubernamentales. «Hoy le hizo pasar un dolor de cabeza al presidente diciendole que no puede licitar cosas de las que nos vamos a tener que hacer cargo nosotros».
